1.Bebe agua del grifo y reutiliza las botellas. Si bien no en todos los sitios es posible (hay sitios donde el agua es horrorosa) si el agua del grifo sale buena ¿porqué no rellenar botellas de plástico?
Esto dicen que no es bueno hacerlo demasiado: el plástico con el tiempo y los cambios de temperatura puede desprender en el agua toxinas. Sin embargo sí se puede rellenar unas cuántas veces las botellas y solamente que una botella se reutilice 2 o 3 veces podemos reducir bastante el uso de plásticos (y las bajadas al supermercado).
No solo eso, el agua del grifo a menudo suele ser más barata — incluso con impuestos — que la embotellada, eso por no hablar de los que tengan la suerte de tener un pozo o los que usan una cisterna: agua potable a precio ridículo. Una carga de agua potable perfectamente apta para consumo humano puede llegar a rondar los 0.005€/litro).
2.Utiliza un filtro de aire para el agua y ahorra en la medida de lo posible. Cuestan poco, se acoplan a los grifos y añaden aire al agua por lo que la sensación de humedad es similar y el gasto de agua menor: ideal para lavarse las manos.
Luego ya podríamos añadir mil cosas para ahorrar agua: ducharse en lugar de bañarse, limpiarse los dientes con un vaso de agua en lugar de con el grifo abierto, etcétera. Pero si de ahorrar agua se trata, esta entrada se vuelve imprescindible.
3.¿Luces de bajo consumo?. Conozco algunas personas que, en mi opinión, son muy puñeteras con las luces de bajo consumo: parece ser que si son de baja calidad y por lo tanto tardan medio minuto en mostrar toda la luz que llegan a emitir ya son “inaceptables”.
Sin embargo una bombilla de bajo consumo aunque es más cara consume menos y su vida útil es mayor, calculando el coste de bombillas (que no de electricidad) de bajo consumo y normales en mi casa durante un año llegamos a la conclusión que entre bombillas fundidas y cambiadas por volverse negras nos sale igual cambiarlas todas por baja consumo una vez que ir cambiando cada año. Algunas no duran todo lo que prometen si no 2 o 3 años, otras están desde hace más. Pero en general compensa y el consumo de electricidad se nota.
Una pregunta habitual en muchos foros y siempre me hago en este tema es porque todavía permiten la venta de bombillas incandescentes. Dejo aparte las bombillas tipo led que se empiezan a usar principalmente en iluminación urbana y semáforos pero no tienen mala pinta para un posible uso particular.
4.Bolsas de tela en lugar de bolsas de plástico. Aunque todavía uso bolsas de plástico, cada vez va a menos: harto de que me cuelen bolsas de baja calidad que se rompen con solo mirarlas en varias tiendas, cuando hay que hacer alguna compra grande uso un par de bolsas de tela: mucho más resistentes, puedes cargar más peso y no terminas buscando una lata de albóndigas en el tubo de escape de un Seat Leon cañi tunning edition.
5.Conducción eficiente y coches ecológicos. Mientras el transporte urbano no sea efectivo, cómodo y barato o al menos “existente” en muchos sitios y se limite el uso del coche dentro de la ciudad, usar el coche será una necesidad aunque a algunos nos pese (y eso que tengo coche). Usar una bicicleta puede estar bien pero en muchos sitios es un peligro mayor que viajar a Irak con una camiseta insultando al profeta.
Si usar el coche es una necesidad, ahorrar combustible conduciendo de forma eficiente puede ayudar tanto al medio ambiente como a nuestro bolsillo.
Conteo
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario